La agrupación “Mujeres, Memoria y Derechos Humanos”, con motivo de la conmemoración del golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, dio a conocer a la comunidad el inicio de su campaña para convertir a la ex cárcel de Arica, ubicada en el centro de la ciudad, en un sitio de memoria de las detenciones políticas y torturas cometidas por la dictadura militar, como parte de la tarea permanente de la sociedad chilena por la verdad y la justicia en estos crímenes de lesa humanidad.
Esta iniciativa se presentó ante la Seremi de las Culturas, de las Artes y el Patrimonio de Arica y Parinacota de modo de poder obtener la declaratoria de sitio patrimonial en el marco de las facultades del Consejo Nacional de Monumentos Nacionales.
Con este fin, “Mujeres, Memoria y Derechos Humanos” inició la recolección de firmas de apoyo y los puntos para que los ariqueños apoyen esta inciativa serán informados, próximamente, por redes sociales.
El pasado 11 de septiembre, la agrupación realizó una actividad conmemorativa en el frontis de la ex cárcel que contó con la asistencia del alcalde, Gerardo Espíndola, de la concejala Dolores Cautivo, de los consejeros regionales Gary Tapia y Zenón Alarcón y de la convencional Carolina Videla, como de integrantes de diversas organizaciones de derechos humanos.
Carolina Videla, en nombre de “Mujeres, Memoria y Derechos Humanos”, manifestó que esta iniciativa les llena de esperanza y optimismo para contar en la comuna con un sitio de memoria. “Hemos invitado a incorporarse a todas y todos que se sientan convocados por el ejercicio social de la memoria para contribuir en este país a establecer garantías de no repetición y encontrar verdad y justicia”, declaró.
“Nos parece un hito fundamental lo que ha ocurrido este sábado 11 de septiembre y también tremendamente emocionante escuchar y abrir espacios para quienes, por primera vez, incluso, se han atrevido a compartir parte de estas fuertes experiencias vividas al haber sido prisioneras o prisioneros políticos en lo que hoy es la ex cárcel”, agregó la dirigente.
En efecto, en el acto conmemorativo, mujeres y hombres que estuvieron presos por razones políticas, incluso sin cumplir la mayoría de edad, compartieron sus experiencias que vivieron en el recinto de Gendarmería, no sólo de dolor y de injusticia, sino también de solidaridad y esperanza junto a la población carcelaria, sus familias y la comunidad.
Por su parte, el alcalde Espíndola, en la actividad, afirmó que “ofrezco lo que sea necesario para que esto se concrete, desde la municipalidad, desde el espacio político… Es necesario… Sólo (quiero) ponerme a disposición. Es más que necesario no fallar en la memoria”. Asimismo, el edil fue una de las primeras personas en sumarse a las firmas de apoyo de la iniciativa, junto a todas y todos los asistentes a la actividad.
