Tras dos semanas de entrenamientos gratuitos organizados por la Oficina de Deportes y Recreación de la Municipalidad de Arica, las canchas del estadio se transformaron en un verdadero semillero de talento y trabajo en equipo.
“Esto es histórico, nunca se había hecho nada en invierno. Los niños, normalmente, se quedaban en la casa jugando PlayStation, pero ahora están en la cancha haciendo deporte, aprendiendo valores y eso se ve bonito”, destacó Jaime Bunsen Cruz, director técnico profesional a cargo de la escuela de fútbol.
La apuesta municipal por realizar actividades deportivas en pleno invierno no sólo rompió esquemas, sino que también abrió una ventana para que los niños de la ciudad encontraran, en la cancha, un espacio seguro, lejos de las pantallas y los riesgos sociales.
Una de las jugadoras de la jornada fue Antonia Terraza, quien, a sus 13 años, vivió la experiencia de las escuelas municipales tanto en verano como en invierno. “Aprendí disciplina, a jugar en equipo y a conocer gente nueva. A las niñas les digo que se animen a venir, yo siempre voy a estar aquí para recibirlas con los brazos abiertos” comentó, entre risas, la joven futbolista.
Los apoderados presentes en la jornada se mostraron felices de saber que la municipalidad brinda oportunidades de acceso al deporte, especialmente en sectores donde los niños enfrentan mayores riesgos sociales.
Para Angélica Izquierdo, apoderada conocida en los talleres municipales, este tipo de iniciativas impactan de una forma positiva a la comunidad, “yo llevo años trayendo a mi nieto y a mi hijo, nos organizamos incluso por WhatsApp para que ningún niño se quede sin venir. Esto es un trabajo en conjunto y un espacio sano para que los niños se proyecten”, comentó.