En el marco de la celebración de Halloween y la creciente compra tanto de disfraces y accesorios, como también de diversos tipos de golosinas, el Servicio Nacional del Consumidor realizara diversas fiscalizaciones en diferentes regiones del país, entre ellas la región de Los Ríos.
Durante esta actividad vamos a inspeccionar diversos locales, principalmente tiendas e importadoras que comercializan golosinas, disfraces y productos cosméticos.
En la acción de fiscalización, se revisará si los locales cumplen con una serie de deberes establecidos en la Ley del Consumidor (LPC), entre ellos, entregar información veraz y oportuna y a la libre elección.
Por ejemplo, si los locales cumplen con la exigencia que los productos estén correctamente rotulados, esto es, que sus etiquetas estén en idioma español, y que se incluya toda la información que exige la normativa para que las y los consumidores puedan tomar una decisión informada.
Además, vamos a verificar cómo los locales informan el derecho a la garantía legal de los productos cuando salen defectuosos, lo que implica, el cambio, la devolución de lo pagado o la reparación durante los seis meses de haber comprado el producto.
También fiscalizaremos otros antecedentes, por ejemplo, si los locales cumplen con el deber de indicar el jefe de local, entre otros aspectos.
Este tipo de fiscalizaciones son relevantes porque permiten comprobar que los disfraces, accesorios y maquillaje que se comercializan en el comercio cumplen con todo lo establecido en la normativa vigente, y de esta forma evitar riesgos durante esta celebración.
Todos los productos que se comercialicen deben tener información en castellano, y se debe incluir el origen, materiales y medidas de precaución para evitar problemas a la salud de las personas, por ejemplo, la edad a la que están destinados, los potenciales riesgos que tienen algunos disfraces o cosméticos respecto del uso para niños y niñas.
Las empresas deben entregar servicios y productos que no arriesguen la seguridad o salud de las y los consumidores, por lo que se deben tomar todas las medidas de seguridad necesarias, oportunas y eficaces para que esto se cumpla.
Los disfraces deben contener una serie de indicaciones, tales como instructivos en español y riesgos que pueda conllevar un mal uso del producto, además de accesorios de acuerdo a la edad de quien lo usará.
Una vez analizados los antecedentes, y en caso de detectarse infracciones a los derechos de las y los consumidores, podríamos adoptar distintos caminos, por ejemplo, enviar oficios de ajustes, o interponer denuncias ante la justicia, instancia donde las empresas podrían arriesgar multas importantes.
