La agricultora Virginia Pacovilca está transformando la agricultura en el Valle de Azapa con Tecno Agricultura, un proyecto que combina mecanización de cultivos y compostaje de residuos vegetales para optimizar la producción local.
Financiado por el programa Capital Abeja Emprende FNDR de Sercotec y ejecutado por Gedes, con un aporte de $3.500.000 durante 2024-2025, la iniciativa ha permitido reducir costos y tiempos de trabajo, modernizar el arado y promover prácticas agrícolas más sostenibles.
El proyecto impulsó, además, la formalización del negocio, con inicio de actividades y facturación, y generó nuevas oportunidades laborales, ya que se proyecta la contratación de dos trabajadores en temporada de siembra y cosecha y un puesto permanente para el mantenimiento del módulo de cultivo.
Asimismo, Pacovilca aprovecha las plataformas digitales para promocionar sus servicios, conectando directamente con clientes y fortaleciendo la presencia de la agricultura familiar campesina en los mercados locales. “Este aporte fue muy importante para mí, ya que me ayudó con la iniciación de actividades de mi emprendimiento”, comentó la agricultora.
Para el director regional de Sercotec Arica y Parinacota, Carlos Martínez, “mejorar las condiciones de vida de las personas y la economía regional, es tarea principal en Sercotec. Buscamos generar impacto incorporando innovación y capacidades en las empresas de menor tamaño, focalizando en aquellas que son lideradas por mujeres; como es el caso de Virginia, a quien más que entregarle recursos, le aportamos una red de apoyo y un cambio sustancial en su vida”.
El gerente regional de Gedes Arica y Parinacota, Sergio Torres, destacó que “Tecno Agricultura es un ejemplo de cómo la innovación y el acompañamiento profesional pueden potenciar la agricultura local, mejorar la rentabilidad de los pequeños productores, beneficiando la calidad de vida de sus familias, así como fortalecer la sostenibilidad en la región”.
HORTALIZAS
“El proyecto ha sido muy bueno para impulsar mi emprendimiento y reducir costos. Me ayudó bastante para poder llevar una correcta gestión de mi proyecto”, asegurÓ Virginia Pacovilca, quien lidera y administra la iniciativa junto a su familia.
Su labor se centra en el cultivo de hortalizas como tomates cherry, ajíes, lechugas, cilantros y cebollín, combinando experiencia familiar con herramientas tecnológicas de última generación.
La incorporación de una motocultivadora y una chipeadora ha permitido acelerar los procesos de arado y transformar residuos agrícolas en compost, mejorando la fertilidad del suelo y reduciendo la dependencia de mano de obra intensiva.
Los próximos pasos del proyecto incluyen ampliar la superficie de cultivo, arrendar la maquinaria en periodos de baja demanda para generar ingresos adicionales, y promover la comercialización asociativa con otros agricultores del valle, fortaleciendo la producción local y la competitividad de la región.
Con esta iniciativa, el Valle de Azapa avanza hacia una agricultura más eficiente, sostenible e innovadora, que combina tradición familiar con herramientas tecnológicas modernas, beneficiando a los pequeños agricultores y potenciando el desarrollo productivo de la zona.